El inicio de los años cuarenta es el punto de partida de la creatividad propia de la familia Basi. Hay que mencionar la estrategia ideal de un primer taller en Barcelona, especializado en género de punto.
Posteriormente y ya en 1986 surge la firma Armand Basi y sus rasgos diferenciadores se basan en la confección de diseños de alta calidad y ante todo vanguardistas.
La constante innovación siempre estará presente en la compañía. Por ello, pronto se inaugura una fabulosa fábrica en Badalona, equipada con una fuerte infraestructura tecnológica para dar rienda suelta a extraordinarias prendas en cuanto a género de punto se refiere.
Su expansión desprende un éxito arrollador. Así, a partir de 1994 Armand Basi se comercializa en España, Reino Unindo, Bélgica, Países Bajos, Estados Unidos, Canadá, Suecia, Dinamarca, Noruega, Finlandia, Francia, Portugal, Italia, Grecia, Rusia, Emiratos Árabes, República Dominicana, Singapur y Taiwán. Asimismo Londres se convertirá en un enclave privilegiado para la inauguración de su primera tienda en 1995. A continuación ciudades como Barcelona, Madrid, valencia, Bilbao, Vigo, Dubai, pasarán a contar con establecimientos de la firma.
Desde 1998 Armand Basi desfila dos veces al año en París dentro del calendario de la pasarela prét-á-porter masculina. Y justo un año más tarde, la marca se introduce en el mercado de las fragancias de lujo, destinadas tanto a hombre como a mujer. Completan su oferta las líneas de gafas, cinturones, joyas, relojes y calzado.
Juste de Nin, director creativo de Armand Basi, ha dejado claro que:
Los otros dos pilares básicos de la marca serían la calidad y la originalidad. La primera nos la daba el hecho de tener detrás a una empresa potente, algo que considerábamos esencial por tener el pleno convencimiento de que la moda, además de imaginación, es industria. En cuanto a la originalidad, Armand Basi nació con la vocación de crear una propuesta propia e identificable, algo a lo que nos hemos mantenido fieles desde nuestros inicios.