Llega la primavera y, además de hacer el cambio de armario, también toca cambiar de bolso. Y, por supuesto, hay que conocer las tendencias que se van a llevar la próxima temporada, que viene marcada por las flores y los estampados geométricos. Es la principal propuesta de Misako, que además lanza múltiples propuestas para que cada mujer encuentre el bolso que necesita para su día a día u ocasiones especiales.
Las tendencias
La colección de bolsos de Misako viene marcada claramente por dos tendencias. Una de ellas son las flores. Los estampados florales están presentes en sus bolsos para poner un punto diferencial y colorido sobre fondos blancos. Es una tendencia con la que la firma apuesta por diseños de bolsos bandolera, mochilas y riñoneras.
No es la única. La otra gran alternativa y propuesta de la firma son los estampados, aunque en este caso son geométricos. La particularidad es que ha optado por tejidos de gran elegancia y con estampados sencillos. Además, se combinan en colores y otros tejidos para darle un toque diferencial al bolso y lucirlo con estilismos que podrían definirse como menos casual.
En este caso, las propuestas son más amplias porque hay bolsos bandolera, así como de diseño shopper, pasando por bolsos de mano o riñoneras. Son modelos que se encuentran en diferentes colores.
Otras opciones
Además de estas tendencias, la colección de Misako incluye también otras propuestas, que sobre todo se basan en bolsos en blanco –es el gran color de la temporada- o tonos claros o pastel, con diferentes diseños.
Podemos encontrar el bolso bandolera acolchado o el bolso shopper de asa corta y de tamaño grande, así como el tipo sobre troquelado. Algunos modelos son de mano, pero pueden convertirse en bandolera, siendo diseños muy versátiles y funcionales.
Para la fiesta, las propuestas pasan por incorporar pequeños detalles como las cadenas, que no solo están en el asa del bolso, sino que también se utilizan como decoración de su parte frontal.
Otra alternativa para ocasiones especiales es bolso tipo sobre en el que se apuesta por el aro a modo de broche como elemento diferencial. Una opción muy elegante y también atemporal.