Hace unos días os comentaba que los cinturones fajín está de última moda y se llevan mucho pero lo cierto es que no se trata de algo aislado, los cinturones en general son un accesorio perfecto para combinar con cualquier look. Si hasta hace unos cuantos años los cinturones eran un elemento totalmente funcional, para evitar perder los pantalones, hoy se utiliza más como un accesorio estético.
Funcionalidad&Estilo
El cinturón es una prenda que se asocia sobre todo a la estética masculina. Siglos atrás no existían tanta variedad de tallas como ahora, ni se compraban tantas prendas diferentes así que el cinturón servía para ajustar la ropa y no perderla.
Hoy, el cinturón se ha convertido en una prenda más del armario femenino y es indispensable para darle un toque diferente a nuestros looks. Puede llegar incluso a ser la parte más importante de un outfit. Los cinturones han pasado por diferentes tendencias y moda, desde los más finos (en piel o metálicos) hasta los más anchas, como el fajín.
Y lo cierto es que casi cualquier look se puede combinar con un cinturón del tipo que sea, incluso los looks de fiesta. En mi opinión hay que utilizar los cinturones a la altura de la cintura, aunque los cinturones a la cadera también hayan tenido su momento, sobre todo en los 70.
Una de las mejores cosas de los cinturones es que ayudan a dar forma y realzar las curvas femeninas y que pueden conseguir sacarte una cintura de avispa de la chistera. Una de las combinaciones más interesantes se puede conseguir añadiendo un cinturón fino con algún detalle, los lazos están muy de moda, un vestidito negro o babydoll. Si, además, lo combinas con un cárdigan y sujetas el mismo con el cinturón tendrás un look chic, abrigado y cómodo… ¿Se puede pedir más?