Es simple pero funciona: las bikers, o cazadoras moteras, se han convertido en un básico en cualquier fondo de armario y es que no hay prenda más versátil, funcional y a la última que ésta. Si antes se asociaba a un estilo muy alternativo, cada ves más se intuye como una pieza de tendencia que encaja con casi cualquier outfit y que puede convertirse en la guinda del pastel de cualquiera de tus looks. Si aún no tienes una no te lo pienses más.
De piel, un clásico
El diseño de las bikers es muy característico: la cremallera, en lugar de estar centrada, se cierra en un lateral, creando un efecto envolvente en la prenda. Las cremalleras son, precisamente, uno de los detalles de este tipo de cazadoras pues, no sólo se encuentran en el cuerpo, también en los puños y bolsillos, dando un toque muy metal a la pieza.
Las biker se denominan así pues eran la seña de identidad de los fanáticos de las motos, aficionados al rock, al heavy y a lucir estas prendas de cuero. Por eso, la piel, es el tejido más habitual para este tipo de prendas. En negro y con algún detalle metálico te darán un look muy punk. Si quieres algo un poco más delicado, apuesta por una biker en rosa palo. Combinada con un total look negro será perfecta para cualquier ocasión.
Reinventándose
La moda es un taller gigante donde todo se puede reinventar y, las bikers, no iban a ser menos. Esta temporada sorprende la presencia de chaquetas de corte biker pero con texturas y colores que no tienen nada que ver con el estilo original.
El corte se mantiene en prendas de lana o felpa, con un diseño algo más estructurado en algunos casos. Las diferentes texturas sorprenden y se adaptan a la figura como una segunda piel. Los colores son protagonistas, tonos pastel, rojos y azules toman el relevo de los clásicos. Un prenda imprescindible.