A principios del pasado verano Blanco anunció que entraba en concurso de acreedores. Desde entonces, poco se sabía sobre el incierto futuro de la marca española. Siete meses después de la noticia, nos hemos enterado de que el grupo saudí Al Hokair ha adquirido por más de 40 millones de euros la mayor parte de los activos de la cadena textil y se ha comprometido a mantener y asumir los 1.200 puestos de trabajo, según ha informado el auto del juzgado Mercantil número 8 de Madrid.
Pero además de mantener a sus empleados, Al Hokair también asumirá la deuda de Blanco. ¿Quieres conocer más detalles sobre esta operación gestionada por la consultora KPMG? ¡Pues muy atenta!
Los detalles de la compra
Según ha podido saber «Europa Press», Al Hokair pagará 1,5 millones de euros al contado, además de asumir la deuda de 6,4 millones de euros, representada en créditos concursales, más el pago de los créditos contra la masa generados por el mantenimiento de la actividad productiva de la unidad desde el 1 de noviembre de 2013 hasta el momento de consumación de la venta, cuyo coste rondaría los 5 millones de euros, en déficit de caja en dicho periodo.
Alhokair
Al Hokair es una entidad con experiencia en el sector de venta de prendas de moda que está presente en 9 países diferentes, bajo un total de 75 marcas de moda. Por supuesto, también conoce el mercado español, donde ha colaborado con marcas como Inditex, Mango y Cortefiel. Además, es uno de los mayores grupos de retail de moda de Oriente Medio, con franquicias a nombre de Zara, Oysho, Stradivarius, Mango, Pull & Bear y TopShop, entre otras.
Blanco
Al Hokair cerró con una facturación de 906,5 millones de euros, lo que acredita su «capacidad empresarial y operativa» para dar continuidad a la actividad económica de Blanco. Por su parte, Blanco tenía una plantilla cercana a los 2.000 empleados y contaba con 245 tiendas repartidas por 23 países, además de tener tienda ‘online’ en España, Portugal y Francia.