No sé si os habéis fijado pero durante los últimos años los diseñadores parecen vivir en el mundo al revés. Les da igual la climatología de la temporada para la que están diseñando… un ejemplo de esta creciente costumbre: este invierno se llevan los shorts. La prenda veraniega por excelencia se resiste a esconderse en el armario con los bikinis, sandalias y toda la parafernalia playera.
Un caso parecido fue cuando hace un par de temporadas se pusieron de moda las botas de verano.
Al igual que este pasado verano los shorts se llevan muy cortos y ligeramente amplios, nada de ir embutidas.
Paradójicamente los de invierno son más fáciles de llevar que los de verano. Algunas mujeres no se sienten cómodas con shorts porque al ser tan cortos revelan ciertas imperfecciones (léase celulitis). En invierno no tenemos este problema ya que las medias tupidas o leotardos cubren cualquier imperfección, podemos ir sexies sin mostrar lo que no queremos que los demás vean.
Este invierno lo tenemos más fácil que nunca para lucir shorts y minifaldas debido a la gran variedad de medias que hay en el mercado, ya que están muy de moda.
Para el día el triunfador es el short vaquero con rotos que tanto se vio este verano. Para la noche sin embargo la mejor apuesta son los tejidos metalizados o el cuero.
Con botas quedan fabulosos, puedes ponerte tanto unas mosqueteras como un botín. Todo tipo de botas están admitidas. Otra alternativa son las bailarinas, olvídate de los zapatos salón.
Se pueden combinar con camisas de cuadros o jerseys, prendas muy desenfadas.
Para ir bien abrigadas podemos optar por blazers o cazadoras de piel acompañadas de un fular o un pañuelo.
Excelente look muy chip me encanta :)