Uno de los días más importantes de nuestras vidas siempre es el día de nuestra boda, fecha en la que, especialmente las mujeres, queremos estar perfectas y radiantes de pies a cabeza y tanto en el exterior como en el interior. Una de las cosas que hay que elegir con mucho detenimiento es la lencería, ya que aunque en teoría solo te la vaya a ver la persona con la que te cases, será la protagonista de la noche de bodas, así que tiene espectacular.
La lencería te ayuda también a resaltar tu figura y destacar algunas partes de tu silueta, así que por eso es también algo muy importante a tener en cuenta y no podemos dejar su elección para el último momento, así que toma nota de estos consejos para elegir lencería nupcial:
– Todas las piezas de ropa interior deberán ser del mismo color y tonalidad que el vestido de novia, y si no es posible en una tonalidad lo más parecida. Fíjate mucho en los matices de cada color ya que, por ejemplo, un vestido blanco puede ser en tono champán, marfil, crema… Ten en cuenta eso para elegir la lencería.
– Es muy importante que te sientas cómoda con todas las prendas ya que de lo contrario podrían arruinarte el día. Por muy bonito que sea un conjunto no valdrá de nada si no tienes comodidad.
– En lo que a tejidos se refiere, lo mejor es que sean prendas de algodón, seda, microfibra o satinados, pero sobre todo que no sea de tejidos sintéticos, especialmente si la boda es en verano ya que te darán más calor.
– Tienes que elegir prendas que realcen tus puntos fuertes y que al mismo tiempo disimulen tus defectos, como por ejemplo el tener poco pecho o tener demasiado. Si estás gordita, elegir un body o un corsé es una idea genial.
– Si llevas la espalda descubierta y aún así quieres, o necesitas, llevar sujetador, los brasieres con tirantes de silicona son la mejor opción ya que apenas se notan. De todas formas, este tipo de vestidos suelen llevar copas para que la sujeción del pecho sea mayor y no necesites sujetador.
– Si tienes un gran escote, lo mejor es que elijas un sujetador push up para redondear y subir el pecho. Un escote nunca, jamás, debe dejar ver los tirantes o el encaje del sostén.