El buen tiempo ha llegado y con él la temporada de bodas, bautizos, comuniones y otras celebraciones en las que tenemos que tener mucho cuidado con la elección del vestido.
Lo más lógico es que tengas que asistir a un evento especial dentro de poco, ya que durante los meses más calurosos del año se multiplican este tipo de acontecimientos. Yo, por ejemplo, tengo que asistir nada más y nada menos que a un bautizo y dos bodas. Si te encuentras en una situación parecida a la mía, te recomiendo que le eches un vistazo a los consejos que vamos a darte a continuación para acertar con tu look el día de la fiesta. ¿Preparada?
Escoger el vestido
Escoger un vestido de fiesta es más difícil de lo que parece. Es importante que tengas en cuenta cuál favorece más a tu figura. Así, si eres baja no te quedarán bien los vestidos largos de fiesta; si tus brazos son anchos y rellenitos, es preferible que evites el palabra de honor, el escote halter y los asimétricos. Si tienes poco pecho, los escotes con pedrería y volantes te sentarán genial y si tienes mucho, son mejores los escotes discretos.
El largo y el color del vestido
Por otro lado, es importante que tengas en cuenta el largo del vestido. En general, para los eventos de día se aconsejan modelos cortos, mientras que para la noche son preferibles los vestidos largos. Eso sí, no te pases enseñando pierna.
En cuanto a colores, este año se llevan los intensos y los flúor. Por otra parte, se aconseja no escoger el negro y el blanco en bodas, aunque tampoco es recomendable asistir de negro a un bautizo. Respecto a los estampados, se llevan los prints étnicos, orientales y geométricos, además de las rayas.
Ropa interior
También debes tener en cuenta que la ropa interior no debe notarse ni verse. Por supuesto, olvídate de llevar tirantes transparentes. Y no te avergüences de probar lencería moldeadora para que el vestido te siente mejor.