Tras muchos meses de espera, este fin de semana por fin hemos podido conocer el vestido de novia de la princesa Magdalena de Suecia, que ha contraído matrimonio con el estadounidense Chirs O’Neill en una romántica boda que se ha celebrado en la capilla del Palacio Real de Estocolmo.
Tan solo unos días antes de la ceremonia se hizo público que el diseñador iba a ser Valentino, a pesar de estar ya retirado. Pero es que el modisto no podía rechazar un encargo tan exclusivo como éste. A continuación te damos todos los detalles sobre el vestido que lució Magdalena en una de las bodas más románticas de la realeza europea.
Los detalles del vestido
Valentino ha captado a la perfección el estilo de la Princesa, con ese toque romántico que ha acompañado a toda la celebración. El vestido era de organza en seda plisada con encaje de Chantilly en color marfil en la zona del escote y de la espalda, con cintura ceñida y falda fruncida con algo de vuelo, que terminaba en una impresionante cola de cuatro metros de largo. Para vestir sus pies, escogió unos tacones de salón en color blanco.
El velo, el peinado, y los pendientes
El precioso velo que la princesa lució era una reliquia de la familia Bernadotte heredada de la Reina Sofía, de organza de seda con bordados de azahar, que sujetaba con una espectacular tiara que pertenece a su madre la Reina Silvia, y que fue un regalo del Rey Carlos Gustavo por su décimo aniversario de boda.
En cuanto al pelo, lo llevó recogido en un moño bajo, que dejaba ver el precioso rostro de la Princesa Magdalena, con un maquillaje sutil y natural, con rubor en las mejillas y tono rosado en los labios. Acompañó el look con unos pendientes tamaño maxi en forma de lágrima que eran un poco excesivos, ya que el brillo era demasiado.