Kate Moss pertenece a esa generación de modelos que sigue trabajando después de 20 años dedicada al mundo de la moda. Siempre ha sido una modelo que se salía de la norma. Cuando la descubrieron a los 14 años, tenía un aspecto muy aniñado, era mucho más bajita que el resto de las modelos y bastante más delgada. Sin embargo, y pese a su juventud, supo convertirse en top model.
En la actualidad, pese a los escándalos (o quizá incluso gracias a ellos) Kate Moss es imagen de Longchamp, Yves Saint Laurent y Top Shop. Además, su estilo propio a la hora de vestir la ha convertido no sólo en un icono de la moda, sino también en diseñadora. Ya ha presentado sus líneas de bolsos para Longchamp y lleva varios años colaborando con Top Shop.
El estilo de Kate Moss se basa en su capacidad para mezclar. Durante el día viste pantalones pitillo que combina con camisetas estilo marinero (tan de moda esta temporada) o sencillas camisetas en blanco o negro. Completa su estilismo de día con blazers de corte masculino, chaquetas de cuero, botas y bolsos oversize.
Incluso en eventos como festivales de rock, Kate Moss ha sabido ir apropiada, cómoda y además glamourosa. Es una habitual del festival de Glastonbury y ya la hemos podido ver varios años luciendo minifaldas vaqueras o minivestidos junto a botas Wellington (conocidas como «wellies») para soportar el barrizal que se forma en Glastonbury.
Para la noche Kate Moss suele elegir vestidos inspirados en la estética de los años 20. En ocasiones da a su imagen un estilo rockero combinando americanas de corte masculino con pantalones ajustados metalizados. Todo un icono de la moda.