La poesía es una de las formas más apropiadas para describir el último desfile de la casa Valentino. El arte de la alta costura se ha mostrado estos días en París de la manera más elegante posible. Aunque utilizaron algunos de los iconos más clásicos de la casa como por ejemplo los encajes, los colores semiáridos y la mejor lencería de lujo los directores creativos de la casa, Maria Grazia Chiuri y Pier Paolo Piccioli, quisieron renovar un poco la propia estética de la famosa marca.
Por otra parte, también abrieron un nuevo camino con la paleta de colores. Antes siempre predominaba el rojo Valentino, que es como se llegó a llamar este color, pero ahora se han atrevido a utilizar colores como el rosa, el negro o el marrón. Chiuri y Piccioli quieren devolver a la marca el glamour que se merece.
Las modelos mostraron agitadas mini camisetas, camisas un poco asimétricas, vestidos de coctel con motivos florales y gasas transparentes en faldas y blusas que daban un aspecto más sensual. Con estos nuevo y audaces conceptos los diseñadores quieren reinterpretarse. No quieren sólo mostrar un ánimo romántico, sino fortalecer los sensuales sentimientos de la medianoche.
En el desfile tampoco faltaron los abrigos largos de piel junto con los chalecos que esta temporada seguro que se van a convertir en los protagonistas indiscutibles. Los complementos más importantes fueron los zapatos y los bolsos con un aire bastante clásico.