Es un referente para mí en lo que a estilo se refiere. Combina a la perfección la modernidad y la frescura manteniendo su carácter y sus gustos. La pequeña Hermione ha crecido y se ha convertido en toda una musa del estilismo y la alfombra roja la adora. Soy una fan incondicional de Emma Watson. Últimamente ha hecho algunas apariciones que me han dejado encantada, he pensado: si tuviera que elegir un icono, ella sería mi favorita. Y es que no sólo se trata de los looks que ha elegido, que son muy acertados, se trata de sus maneras, de su delicadeza y de ese estilo tan suyo que nunca deja de lado.
Elegancia británica
A diferencia de otras muchas actrices que caen en la repetición, creo que Emma sabe adecuarse a ella misma y a lo que quiere llevar en cada momento. Su última aparición en la Gala GQ, vestida por Balenciaga en lo que, para muchos, podría ser un look imposible, ha sido más que comentada. Sólo ella puede lucir un look transgresor, como si lo llevara cada día, y manteniendo ese aura angelical.
En el festival de Cannes ya apostó por el binomio blanco y negro, pero con un look completamente diferente, delicado y con un toque años 40 que le sentaba como un guante.
Atrevida y sofisticada
Arriesga pero siempre acierta, consiguiendo crear lo que muchas no consiguen: un estilo propio, que la define, que permite identificarla pero sin encasillarla. La moda se ha convertido en algo tan mediático que es difícil mantenerse fiel a los gustos de uno pero Emma Watson consigue crear ese sello personal en cada look.
Cada vez que hay un evento de alfombra roja todos los ojos están puestos en ella. ¿Seguirá sorprendiéndonos? Estoy convencida de que sí.